La verdad es que esta nueva temporada es una continuación de lo que hemos visto hasta ahora, eso sí, con pequeños cambios.

La naturalidad manda,  toca olvidarse de los tonos que van gritando ¡me he teñido el pelo! Apostamos por los rubios dorados, los marrones cálidos o el color caramelo, desterrando los rojos o los negros intensos.

Para las más atrevidas proponemos 'copiar' a las celebrities con colores en tonos pastel como el rosa, el azul, o el lila para llamar la atención. ¡Incluso el gris perla que durante años lucieron nuestras abuelas con los famosos 'plis'!

Para las que se resisten a que termine el verano, las mechas californianas se reinventan con el conocido como 'efecto ombré', con una diferencia de color mucho más leve gracias a tonos que se aclaran sutilmente de medios a puntas, como si el sol todavía estuviera rebajando tonos en nuestra melena.