¿Rubia y morena a la vez? El sueño de muchas mujeres se ha hecho realidad. La nueva moda en coloración, el bronde, ha tomado la calle.

En la mente de las morenas siempre ronda la idea de cómo se verían con el pelo rubio, y a las rubias les gusta experimentar los efectos de colores más oscuros sobre sus melenas.

La respuesta a todo esto es una: bronde. Quédate con la palabra porque lo escucharás mucho de ahora en adelante, en Hollywood ya se ha convertido en un must have del verano. 

Su nombre viene de la contracción de brunete y blonde (morena y rubia), lo que da como resultado la palabra bronde.

Hay que aclarar que realmente no es "moreno o rubio", hablaríamos de castaños aclarados hacia dorados 3 tonos más claros aproximadamente. Olvidaros de la cabeza rubia y negra que lucia Mónica Naranjo cuando se dio a conocer.

¿Cómo conseguir el bronde?

La idea es sencilla, darle luz al cabello castaño incorporándole mechas rubias. La complicación es la naturalidad con la que se aplique la mezcla de colores, para ello se puede aclarar más las puntas, y lograr así un color más natural, como bañado por el sol. El efecto del verano suele aclarar nuestros cabellos, dándoles ese tono dorado tan favorecedor que el bronde intenta recrear.

Sin duda el éxito de esta nueva tendencia capilar es el hecho de no perder la identidad de tu cabello, puedes llevar tu pelo algo más aclarado sin dejar de ser morena. Su aspecto natural y desenfadado son ideales para peinados veraniegos como trenzas de raíz, moños de bailarina y por supuesto para melenas sueltas, al más puro estilo californiano.

Existen variantes al bronde. Para gustos los colores, y nunca mejor dicho. Si eres morena pero no quieres reflejos rubios en tu cabello, sino rojizos, eres una chica Broux. La idea es la misma, incorporar mechas del tono elegido de una forma muy sútil para que se entremezcle con tu tono de pelo. Y si eres rubia y lo que quieres es resaltar tonos miel, algo más oscuros que tu color base, lo tuyo es el Blinger.